Madrid Nunca invitado tan ilustre

Ahora que te has ido has de saber APRECIADO FARAON que hacía tiempo que no nos sentíamos como nos has hecho sentir. Nos devolviste la ilusión que un día creímos perdida y créenos que no era algo fácil de conseguir. Nos hacías tremendamente felices cuando nos llamabas y pronunciabas un “Yo no quiero una parka, ni un puto anorak ni nada q se le parezca”. Vaya desde aqui este pequeño homenaje, que ni es mucho ni es poco.
Para glosar esta hagiografia, ( Si has leido bien astuto lector hagiografia) hemos decidido hacer un pequeño book con momentos cotidianos de nuestro amigo. Recuerdos a tu acompañante en estas dos semanas de duro trabajo

RAMÓN EL FARAON

VUELA POR EL CIELO;

SU ALIENTO DE FUEGO

DERRITE HASTA EL HIELO.

RAMÓN EL FARAON

ANDA POR LA NOCHE;

BATE SUS DOS ALAS

A TROCHE Y A MOCHE.

RAMÓN EL FARAÓN

VUELVE DE MAÑANA;

SE ACUESTA EN SU CAMA,

CIERRA LA VENTANA.

RAMÓN EL FARAÓN

SUEÑA CON FARAONES

QUE SON, COMO ÉL,

FAROENES RAMONES.